Los nicaragüenses, especialmente las mujeres, cuentan con un nuevo mecanismo de protección, al ser aprobados los 69 artículos que contiene la Ley contra la trata de personas que castigará a los infractores con penas de hasta 20 años de prisión.
En el ejercicio de sus funciones, los diputados de la Asamblea Nacional también acordaron establecer como agravante de la trata humana, si el delito afecta a mujeres menores de 18 o mayores de 60 años.
De acuerdo con el diputado sandinista Carlos Emilio López, vicepresidente de la Comisión de Asuntos de la Mujer, Juventud, Niñez y Familia, también serán agravantes los delitos contra pobladores de los pueblos originarios o afrodescendientes y personas con discapacidad.
La ley también penalizará otras modalidades de la trata, como los matrimonios simulados, las adopciones ilícitas, el tráfico de órganos, la mendicidad, así como el empleo de tejidos y fluidos humanos, entre otras faltas.
Asimismo, la legislación dispone el establecimiento de un sistema único de información que se encargará de identificar cuántos casos reales se presentan en el país, cuántos son judicializados, los sancionados, las formas de trata que se suscitaron, entre otros temas.
El cumplimiento de ese sistema informático será responsabilidad de la Coalición Nacional Contra la Trata de Personas facultada para formular las políticas públicas de la ley y que encabezará una secretaria ejecutiva que se encargará de la parte operacional.
Con la ley se podrán incautar los bienes y cuentas bancarias de los acusados por este delito, siempre y cuando se compruebe que fueron obtenidos a través de esta actividad ilícita, afirmó el diputado Filiberto Rodríguez, presidente de la Comisión de Paz, Defensa, Gobernación y Derechos Humanos de la Asamblea Nacional.
Al referirse a los afectados, el diputado afirmó que “la identidad de las víctimas se protegerá en todo momento”, y agregó que el Estado de Nicaragua destinará los fondos necesarios para la aplicación de la ley.
Publicado en www.lavozdelsandinismo.com el 29 de enero del 2015.
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