20 de enero de 2015

El derecho a un nombre

Un total de 1,959  niños fueron  inscritos en el Registro Civil de las Personas a través de brigadas móviles en los Territorios Indígenas de Mískitu Insin Tasbaika Kum (MITK), Mayangna Sauni Bu (MSB) y Kipla Tani Tasbaika (KTT).
LA PRENSA/ ARCHIVO
Casi dos mil niños originarios de las comunidades indígenas en la Región Autónoma del Caribe Norte (RACN) fueron inscritos en el Registro Civil de las Personas con apoyo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Un derecho fundamental

Carlos Emilio López, exprocurador de la Niñez y la Adolescencia, manifestó que el derecho a un nombre y una nacionalidad está establecido en la Convención de los Derechos del Niño, en el Código de la Niñez y la Adolescencia; y el recién aprobado Código de Familia que entrará en vigencia el próximo mes de abril y que establece gratuidad del primer certificado de nacimiento sin importar la edad.

Además López dijo que tener un nombre es el derecho inicial para ejercer otros derechos como la salud y la educación.


El Registro Central del Estado Civil de las Personas, junto con las alcaldías de San José de Bocay y Wiwilí-Jinotega, conformaron brigadas móviles para visitar las comunidades remotas de los territorios indígenas para la inscripción de nacimientos.

La jornada de inscripción contó con la participación de 196 líderes comunitarios que recibieron capacitación sobre la importancia de la inscripción de los niños en el Registro Civil de las Personas como el primer gran derecho que garantiza el acceso a otros derechos.

Según Unicef, una de las principales barreras para la no inscripción de los nacimientos de los niños en estas comunidades indígenas es la lejanía de las cabeceras municipales, ya que la mayoría de los partos son atendidos por parteras y no son reportados al Ministerio de Salud (Minsa). De esta manera los menores van quedando en un limbo, porque simplemente no existen legalmente.

Por su parte, Carlos Emilio López, exprocurador de la Niñez y la Adolescencia, manifestó que en el 2006 en Nicaragua tenía un 35 por ciento de niños no inscritos en el Registro Civil de las Personas y en algunas comunidades de la Costa Caribe había hasta un ochenta por ciento de niños no inscritos. Además señaló que actualmente el porcentaje a nivel nacional es de aproximadamente un 15 por ciento.

Según López, la reducción de un veinte por ciento de niños sin nombre legalmente se ha logrado con el programa Derecho a un Nombre que coordina el Ministerio de la Familia y que consiste en ir casa a casa en busca de los niños que no estaban inscritos e inscribirlos gratuitamente.

Publicado en La Prensa por Carla Torres Solórzano el 17 de enero del 2015.

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